martes, 6 de noviembre de 2012

Desaparecidos del Palacio de Justicia

Noviembre 6 y 7 de 1985 - Noviembre 6 y 7 de 2012


Por favor que cese el fuego inmediatamente, divulguen, inmediatamente que cese el fuego...


Hace 27 años el Palacio de Justicia ubicado en la Plaza de Bolívar del centro de Bogotá, en Colombia, fue ocupado hacia el mediodía, un 6 de Noviembre del año 85, por el Movimiento 19 de abril, M 19. Cuatro horas después este era el grito del magistrado Alfonso Reyes Echandía, era el clamor en medio de condiciones de indefensión en la que se encontraba de clamar por una salida humanitaria

Ese medio día, la guerrilla pretendía realizar un juicio político al entonces presidente de la república Belisario Betancourt por el fracaso del proceso de negociación. Pero el uso de la fuerza no logró la respuesta deseada. Por el contrario la reacción de las fuerzas militares fue desproporcionada, excesiva, irracional, bárbara. Al fuego mucho más fuego. Signo de lo que la historia de violencia de Colombia se iba a vivir desde ese día hasta hoy.

Las Fuerzas militares de Colombia iniciaron la retoma de éste. Llegaron entonces los primeros tanques EE-09 Cascabel y Urutú. , poco a poco la voz de Reyes Echandía se iba ahogando

No pasaron más de dos horas cuando el ejército logró ingresar por la puerta principal del Palacio, dos horas antes que la voz de Reyes se convirtiera en un clamor nacional, nunca escuchado…. QUE CESE EL FUEGO

El tanque Cascabel irrumpió en el palacio luego de forcejear la puerta principal. Desde ese momento se intensificaron los ataques y contra ataques de unos y otros. Un combate en el propio centro de la ciudad, un combate a puerta cerrada del que solo se oían estruendos en la calle.


Los guerrilleros junto con algunos de sus rehenes se vieron obligados a dirigirse a los pisos superiores. Entre tanto, quienes iban recobrando su libertad iban siendo trasladados a la Casa del Florero para su identificación y realizarles una serie de preguntas. Algunos allá fueron torturados y otros torturados y desaparecidos, en cuartos especiales, en los que el Teniente Coronel Alfonso Plazas Vega, busca detener, arrasar con los guerrilleros, sin importar los civiles. “Era defender la democracia maestro, como respondió el oficial a periodistas.

Entre los desaparecidos se encontraban los trabajadores de la cafetería del palacio de justicia, algunos visitantes ocasiones del palacio y la guerrillera Irma Franco


Mientras algunos eran torturados y desaparecidos, algunos medios replicaban la voz de Reyes Echandía pidiendo CESE AL FUGO

En medio de la censura de prensa ordenada  por la ministra NOEMI SANIN,  y del golpe de facto negado aún por el presidente BELISARIO BETANCUR… terminado el partido de Futbol, mientras la ciudad dormía se produjeron ataques  con bombas que generaron un  incendio.

 Entre tanto el incendio tomaba fuerza los miembros del M-19 retenían a algunas personas que trataban de escapar del fuego y los llevaban a los baños del segundo y tercer piso. Sesenta personas permanecieron desde la noche del 6 de noviembre hasta el final de la toma en dichos baños de 20 m2.

El 7 de noviembre terminada la operación rastrillo, poco antes de las 2:00 p.m. continúo funcionando la maquinaria criminal del Estado. Los militares tomaron control total de la edificación en ruinas, modificaron la escena del crimen, mientras los desaparecidos se encontraban en el cantón norte, sin ser registrados en los libros de control militar. Otros de los que salieron con vida fueron  ejecutados  y sus cadáver vueltos a ingresar al Palacio de Justicia, como el magistrado Carlos Horacio Urán

Tiempo después se constató que los restos de Reyes Echandía, tenían balas oficiales, su vida fue segada por las fuerzas militares

Hoy los familiares de los desaparecidos siguen exigiendo justicia y verdad. ¿En dónde está Carlos Augusto Rodríguez Vera, Cristina del Pilar Guarín Cortés, David Súspes Celis, Bernardo Beltrán H., Héctor Jaime Beltrán, Ana Rosa Castiblanco, Gloria Estela Lizarazo F., Luz Mary Portela León; Norma Constanza Esquerra, Gloria Anzola de Lanao, Luz Amparo Oviedo, Irma Franco Pineda…? Hoy la familia de Carlos Horacio Urán exige justicia ante la infame ejecución extrajudicial

“Según investigaciones realizadas por varios juzgados, el Consejo de Estado y la Fiscalía General de la Nación, los desaparecidos del palacio en manos del Ejército son once personas entre empleados de la cafetería y visitantes ocasionales. Una más era guerrillera del M-19.

Así mismo la Fiscalía General de la Nación en documento del 28 de Septiembre del año 2007, manifestó: “las personas que no murieron en el Palacio de Justicia fueron llevadas al Museo Casa del Florero y desaparecidas”

Una Comisión de la Verdad expresó “No hubo ningún plan dirigido a liberar rehenes (…) Desde cuando se dio por finalizada la recuperación del palacio, se empezó a enmascarar la verdad de lo ocurrido allí.” 

En el afán de los militares por "alterar o suprimir la evidencia llegaron a extremos insospechados: una vez llevados a la morgue para la correspondiente necropsia un juez de Instrucción Penal Militar que no cumplía ningún rol dentro de la investigación, el 9 de noviembre ordenó mediante oficio que el receptor de cadáveres del Instituto de Medicina Legal le entregara 23 cuerpos a un suboficial, nueve de personas reconocidas y el resto sin identificar para inhumarlos en el Cementerio del sur que efectivamente fueron sepultados en una fosa común".

La excusa a esta repudiable acción era que se trataba de guerrilleros cuyos cadáveres de seguro serian rescatados por el M-19, y por temor a un nuevo "ataque" se atendió a las órdenes del juez de Instrucción Penal Militar.

 El 9 de Junio del año 2010, la juez Tercera del circuito Especializado de Bogotá María Stella Jara, sentenció a 30 años de prisión al Coronel (r) Luis Alfonso Plazas Vega en primera y segunda instancia y al ex general Jesús Armando Arias Cabrales en primera instancia. Aún se espera que la Corte Suprema de Justicia como el Tribunal Superior de Bogotá ratifique la condena del general, en medio de la crisis por la que hoy atraviesa el aparato de justicia con la injerencia uribista de la unidad nacional de Santos y del procurador Ordóñez. Porque 27 años después siguen construyéndose nuevos mecanismos de impunidad.  

El Tribunal Superior de Bogotá ordenó continuar las tareas de búsqueda LOS FAMILIARES DESAPARECIDOS o sus restos, la realización por el Estado de actos de perdón a los familiares y a la sociedad, así como la solicitud a la CPI para que investigara el compromiso del ex presidente Betancur en la comisión de los crímenes.

Aquí solo hubo absolución del presidente Juan Manuel Santos que llevó más allá de otros mandatarios y pidió perdón a los militares usando el padre nuestro.

Las ambigüedades de la justicia son evidentes, el ex general Iván Ramírez Quintero (ex comandante del Comando de Inteligencia y Contra Inteligencia –COICI–) a pesar de la sentencia de primera instancia que lo responsabiliza en las desapariciones forzadas, una juez decidió absolverlo. Las actuaciones dilatorias del aparato judicial se develan en los cinco ex miembros del grupo de inteligencia del ejército (B-2), en cabeza del ex coronel Edilberto Sánchez Rubiano, gracias al favor de la Procuraduría General de la Nación y sus defensores.

A pesar de las condenas los familiares de los desaparecidos no saben el paradero de sus seres queridos y los condenados disfrutan de los privilegios de las instalaciones militares, clubes y universidades, aparentemente pagando su condena. El Instituto Penitenciario y Carcelario de Colombia (INPEC) ha incumplido con el sitio de reclusión que corresponde de acuerdo a la ley en el caso de crímenes de lesa humanidad

Nuevas sombras de impunidad se ciernen. La ampliación del fuero militar a punto de ser aprobado en el congreso o un marco jurídico para la Paz demuestran las pretensiones de asegurar que los militares de este caso y de los pocos en que ha avanzado la justicia por otros crímenes de lesa humanidad y violaciones de derechos humanos, aseguren su absolución. Incluso los diálogos con los movimientos guerrilleros para solucionar el conflicto quiere usarse por el establecimiento para crear una suerte de punto final como sucedió en Argentina y Chile.... pero ¿dónde están los desaparecidos? donde están los responsables de la ejecución extrajudicial del magistrado Carlos Horacio Urán.

Hoy los familiares y amigos conmemoran 27 años de búsquedas, de afirmación de la memoria, de persistencia en la búsqueda de la verdad, de la justicia y la dignificación de la historia de sus seres queridos, de esos seres humanos con sueños, anhelos, con vidas en un porvenir.

Usted sabe dónde están? 

Si tienen información comuniquese a info@comisionbusqueda.com y exija a la Comisión de Búsqueda de personas desaparecidas apoyar un plan de búsqueda para su ubicación y entrega a sus familiares . Teléfono en Bogotá 2102329.

Desaparecidos y Desaparecidas del Palacio de Justicia en la memoria,
Desaparecidos y Desaparecidas del Palacio de Justicia Sin Olvido.

Sin Olvido 

Mario Castro Bueno

Noviembre 1 de 2002 - noviembre 1 de 2012


Memoria y Justicia

Hace cinco años, el día de todos los santos, un viernes 1 de noviembre del 2002, fue asesinado MARIO CASTRO BUENO, por unidades de la estrategia militar encubierta en el municipio El Castillo. Eran las 2:30 p.m., cuando MARIO, quien se desempeñaba como Personero Municipal, fue obligado a bajar del vehículo de servicio público en el que se movilizaba hacia la ciudad de Bogotá para participar en un diplomado de Derechos Humanos. Los paramilitares interceptaron el bus a la altura del sitio conocido como La Bodega, en la vía entre Medellín del Ariari y Pueblo Sánchez.

MARIO fue llevado por los paramilitares, asesinado y solo hasta el siguiente día su cuerpo fue hallado degollado en un paraje rural.

MARIO, un hombre sencillo, de profundas convicciones, nacido en un hogar creyente, nacido en un hogar de cuna crítica. Simplemente coherente, al lado de la justicia, en profunda insensibilidad con la impunidad. De sus miedos asumidos en coraje, defensor de derechos humanos, Personero Municipal, constructor de un nuevo país, en medio de la guerra, entre el oscuro socavón de la impunidad.

MARIO, un hombre querido por los campesinos y campesinas del Alto Ariari. Consecuente con sus convicciones y su labor fue el único funcionario público que escuchó los testimonios de las víctimas, asumió el inicio de investigaciones, de búsqueda por lo menos del esclarecimiento ante la imperante impunidad del departamento del Meta. Cuando EYDER QUIGUANAS fue asesinado por unidades del FUDRA del ejército, MARIO fue hasta la vereda La Floresta, habló con la familia, recogió los testimonios, algunas pruebas y colocó una denuncia por los hechos. Después del asesinato de MARIO, los testimonios, pruebas y denuncias, en su mayoría desaparecieron misteriosamente del despacho de la Personería, entre ellas las del caso de EYDER, el primer asesinato que generó el desplazamiento de los campesinos del Alto Ariari entre el 2002 al 2004.

MARIO, por su consecuencia, por cumplir con su labor de Personero, fue asesinado. Los victimarios quisieron con su muerte acallar, ocultar, enterrar la verdad y la búsqueda de Justicia. MARIO, testigo del desplazamiento del Alto Ariari, testigo de los operativos militares regulares e irregulares a través de la estrategia paramilitar.

MARIO, una vida por la vida, fue militante desde su juventud, un comunista, como muchas veces se presentaba. No dejó de asistir cada año a los festivales del periódico VOZ, desde el primero hasta el último que pudo estar. Fue militante estudiantil, llenó su casa de diplomas, toda la vida fue un estudiante. Participó de la administración municipal de la Unión Patriótica en Apartadó, como Tesorero. Fue Alcalde de Fortúl y Lejanías en el Meta. Y los últimos años dedicado a la Personería del municipio El Castillo.

MARIO, le encantaba viajar, tomar fotos, la música colombiano, los boleros, la música de la nueva trova cubana, del son y la salsa. La de Iraquerí y los Hermanos Escamilla. Coleccionista de botones, el último que adquirió en el 2002 tiene la foto de Manuel Cepeda Vargas.

MARIO, en la memoria de su familia, de sus amigos, de aquellos que lo conocieron en ejercicio de su labor de defensor de la vida, de buscador de justicia y de constructor de sueños. MARIO en la memoria de todos, como lo expresa una de sus sobrinas en este corto escrito:

AMIGO TE ADMIRO NO SOLO POR LO QUE SOS
SI NO TAMBIEN POR QUE DIA A DIA LUCHAS POR EL PAN Y POR LA VIDA. 
SIN IMPORTAR CUAN DIFICIL SEA ESTAR COMBATIENDO TODO EL MAL
Y ES QUE NO SON SOLO ESAS COSAS LAS QUE TE HACEN ESPECIAL.
HAY DIAS EN LOS QUE LA IMPOTENCIA TE DERRIBA
Y TE ASUSTAS AL VER LO QUE EL MUNDO PUEDE SER 
Y SE QUE DUELE CUANDO MATAN LA ESPERANZA Y NOS ATACAN.
HOMBRES COMO VOZ SON SOLO CORAZON SIN CONTAR CON SU RAZON Y REBELION.

TU SOBRINA VANNESSA MORALES CASTRO, SEPTIEMBRE 2004”

Han pasado 10 años del asesinato de MARIO, diez años de crímenes en la región del Alto Ariari, diez años de Impunidad. Han pasado 10 años y la investigación por el asesinato de MARIO CASTRO BUENO aún se encuentra en preliminar, no hay nadie vinculado, nadie para la Fiscalía es responsable de este crimen.

Ante la ausencia de investigaciones, ante la ausencia de justicia, queda la afirmación de la verdad, de la vida de MARIO, de la Memoria, de lo que somos.
Por ello,

Mario Castro Bueno en la memoria
Mario Castro Bueno Sin Olvido 

Bogota. D.C. 2 de Noviembre de 2012

Sin Olvido